1990

90

Jacqueline Fuentes

El de Jacqueline Fuentes es otro de los nombres de músicos chilenos que se han abierto caminos fuera de Chile gracias a las sonoridades latinoamericanas fusionadas entre sí y con otras influencias, que en el caso de esta cantante y compositora incluyen el folclor y la música clásica. Radicada desde 1995 en Los Angeles, California, ha grabado dos discos y sus canciones han sido antologadas en el catálogo del sello de músicas del mundo Putumayo en EE.UU.

Valentín Trujillo

La televisión ha sido una gran vitrina para el talento del pianista y orquestador Valentín Trujillo Sánchez, aunque no del todo justa con la profundidad de su trabajo y el alcance de sus vastos conocimientos musicales. El casi eterno acompañante del animador Don Francisco, como director de orquesta en “Sábados Gigantes” es, también, uno de los arregladores fundamentales de la música popular chilena durane una era de oro para la industria fonográfica, tanto en discos como en grandes conciertos. Junto con ello, Trujillo fue proyector de nuevas figuras de la música a lo largo de las primeras décadas del siglo XXI. En 2024 su nombre marcó un hito más al convertirse en el primer intérprete de música popular en ser distinguido con el Premio Nacional de Música.

Arturo Gatica

Si Gatica es un apellido célebre en el mundo gracias al éxito universal de los boleros de Lucho Gatica, hay en la historia un hermano mayor que hizo triunfar primero el nombre de la casa: ése es Arturo. Cantante y actor, Arturo Gatica es modelo del artista del disco, la radio y el cine consagrado en los años '40 en Chile, y afianzó su popularidad en todos esos frentes como intérprete de tonadas, tangos, valses y boleros, competente por igual en la música típica chilena y en el cancionero latinoamericano. Más de medio siglo de carrera le permitió iniciar sus grabaciones en la era del acetato y extender hasta los años '80 y '90 su discografía, marcada por éxitos como las tonadas ''Yo vendo unos ojos negros'', ''Mata de arrayán florido'', ''Ende que te vi'' y ''Fiesta linda'', canciones como "Tendrás un altar", y su popular versión del tango ''La calesita".

Cirilo Vila

Premio Nacional de Artes Musicales 2004, Cirilo Vila fue un activo compositor, pianista y académico chileno, que cruzó entre mundos artísticos y pudo forjar una privilegiada formación con maestros de Chile y Europa. Como a pocos músicos, sin embargo, a su impronta como creador e intérprete la sostenía también su amor por la docencia. Vila fue formador de varias generaciones de músicos, desde un espacio en el Departamento de Música y Sonología de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile que mantuvo desde 1970 y por más de cuatro décadas. Vila fue un destacado pianista tanto solista como en música de cámara, y tuvo un tiempo de trabajo junto al Ensamble Bártok. Su obra como compositor muestra piezas asociables a la música docta, experimental, contemporánea, popular e incidental para teatro. «Nos enseñó algo de lo que nunca se habló en clases —recordaba sobre su tiempo como alumno suyo Eduardo Carrasco—; esto es: el amor a la música, que es algo que no se enseña, pero sí se contagia».

Andrés Pollak

Conocido principalmente como integrante del grupo de jazz fusión La Marraqueta, Andrés Pollak es pianista, compositor y productor en diversos campos de la música, aunque desde la posición creativa con aquel conjunto que confundó en 1992 ha dejado sus señales en la autoría de una música de marcada sofisticación. Sin álbumes solista pero con un catálogo amplio de composiciones para piano y para el ensamble, Pollak es además uno de los músicos que primero tuvo experiencia de formación en Berklee. En esa historia aparecen también distintos momentos como pianista y tecladista de grupos tan disímiles como Los Trapos en los '70, Cometa en los '80 y la reunión de los Blops en los 2000.

Denisse Malebrán

Denisse Malebrán ingresó a Saiko como una cantante de cierta experiencia (a los 23 años ya contaba con clases de canto y participación en bandas independientes como Turbomente y Polaroid), pero el grupo la convirtió en una cantante popular, cuyos pasos dentro y fuera de la banda consiguen importante atención. Además de su trabajo junto a Saiko, como solista se ha afirmado en la autoría y en un estilo voluntariamente masivo, que no desdeña el pop y se aferra a la guía firme de la melodía vocal como su principal ventaja comparativa.

Santo Barrio

Una marabunta es una población masiva de hormigas migratorias que devora todo lo comestible que encuentra a su paso. También un conjunto de gente alborotada y tumultuosa. Y además, una canción del primer disco de Santo Barrio, Tumbao rebelde (1997), que ilustra con propiedad el carácter del grupo: una banda de numerosos integrantes que, durante su historia, barrió con todo a la hora de presentarse. Sus shows en vivo fueron sinónimo de una jarana de largo aliento, pero, sobre todo, de una revisión atípica hasta entonces en Chile para sonidos aprendidos de la tradición ska, funk, salsa, jazz y de rock latino. Santo Barrio fue una banda enérgica y con contenido, cuyo recuerdo avivó una entusiasta reunión a fines de 2024.

Rékiem

Aunque comenzaron como Réquiem en 1989, la historia oficial de esta banda arranca en 1995, con sólo un sobreviviente de esa etapa inicial, el guitarrista Julián Durney. La banda es nombre fundamental del aggro-metal chileno, trascendiendo los circuitos del género para ingresar incluso a la parrilla de MTV. Su historia de más de una década incluyó logros y también notables pruebas dramáticas, como la muerte de su líder, destacando siempre un sonido rockero de búsqueda y evolución a lo largo de una discografía estable y una agenda siempre activa de conciertos.

Amelia Wenborne

Saxofonista y flautista iniciada en el jazz en '80 en la escuela de Roberto Lecaros, Amelia Wenborne fue una pionera entre las mujeres instrumentistas dentro del jazz, más allá de la tradicional participación de género en el canto. Pronto pasó a acomodarse en el lenguaje del swing orquestal y sobre todo en el latin jazz, integrando filas de cañas en agrupaciones como Los Andes Big Band (del trompetista Santiago Cerda) e Irazú (del saxofonista Raúl Gutiérrez). Ha tocado en los círculos del Club de Jazz desde los tiempos de la sede en calle California. También es profesora de saxofón en el Instituto Projazz.

Los Tetas

Al menos tres etapas marcan la historia de Los Tetas, banda-cuna no sólo de una apuesta poderosa de funk hecho en Chile, sino también de trayectorias musicales individuales que han aportado a la música local. En los años noventeros de transición democrática, Los Tetas pusieron en la radio una serie de canciones que vinieron a marcar época: "Corazón de sandía", "Hormigas planas" y "La medicina", entre otras. Aquellas sucesivas fases en su historia deben rastrearse en pasos dentro y fuera de Chile, entre períodos de gran éxito autogestionado y otros de avance lento y distancia entre sus integrantes. Su reactivación en 2011 y sus planes de relanzamiento chocaron al poco andar con noticias cubiertas por la crónica policial, que por varios años mantuvieron al conjunto en la incertidumbre y a sus músicos en proyectos por separado. En 2024, Los Tetas se presentaron como un proyecto rearticulado, aunque como dúo.

Los Huasos Quincheros

Los Quincheros representan la expresión viva y activa de la tradición de los grupos de huasos inaugurada en Chile en la década del '20. Un grupo de profesionales vestidos como huasos patronales, intérpretes de un repertorio campesino elegantemente arreglado con voces y guitarras, conforman este modelo musical; creado por conjuntos como Los Cuatro Huasos o Los Guasos de Chincolco, y que, a la larga, ha llegado a ser el emblema de un tipo de folclor chileno. A pesar de que la génesis de estos conjuntos tuvo poco o nada que ver con el campo, hoy día nadie pone en duda el lugar fundamental que ocupan en la música tradicional, y los ochenta años de actividad regular de Los Quincheros lo confirman.

Mauricio Rodríguez

Como una joven promesa de la guitarra eléctrica en los comienzos de 1991, Mauricio Rodríguez traspasó rápidamente los territorios del blues-rock en que se desplazaba siendo miembro de La Banda del Capitán Corneta, para instalarse como uno de los guitarristas de jazz más activos y sobresalientes del período. Presente en la escena del jazz de la transición, Rodríguez fue parte de la generación que expandió esta música hacia una nueva época en la composición moderna y la autogestión discográfica, representada en uno de los trabajos pioneros en este ámbito: el disco Datriza, que produjo en 1998 con su primer conjunto como líder, Almendra Trío.

Los Ángeles Negros

Los Ángeles Negros fueron los creadores de uno de los pocos sonidos auténticamente originales que han surgido en Chile. La fórmula de la música romántica con instrumentos de rock constituye hoy día una ecuación universal del género, pero hasta 1968, cuando este grupo nació en un pueblo al sur del país, el formato existía muy excepcionalmente. Los cantantes románticos, por lo general, tocaban acompañados de guitarras acústicas –al estilo de Los Panchos– o con orquestas –en la tradición popularizada por Agustín Lara y otros grandes nombres. Germaín de la Fuente y su conjunto –con alineación de guitarra, bajo, batería y teclado- consolidaron y masificaron esa nueva fusión, que hasta hoy es el soporte más común de la música romántica de todo el continente.

Pedro Frugone

El guitarrista Pedro Frugone asumió la música como vocación temprana, y ha sido hasta hoy persistente en su trabajo y leal a ese llamado. De entre las muchas bandas de las que ha formado parte, las más importantes han sido Anachena, Viena y sobre todo La Ley, con quienes tocó por casi veinte años. Ha colaborado con diversos músicos locales, y en 2007 publicó un álbum solista.

Guido Ruiz

Saxofonista alto y soprano perteneciente a la generación de los ‘90, quien elaboró la mayor parte de su carrera en Concepción y Valdivia. Allí, Guido Ruiz alternó su profesión de químico y su rol como académico de la Universidad Austral con la de músico de jazz, encabezando una serie de cuartetos bop donde el sonido de su saxofón lo acercó a los de figuras como Jackie McLean y Gary Bartz. Musicalmente, Guido Ruiz transitó entre el jazz contemporáneo y el jazz de fusiones, en una época en que además llegó a tomar el testimonio de los primeros músicos que impulsaron el jazz en Valdivia: el baterista Osvaldo Chalupa Martínez y el pianista Fernando Wohlwend.

Zapallo

Junto al reconocido grupo Mazapán, el ensamble convocado por el flautista Rodrigo García y el violinista Gonzalo Pinedo bajo el nombre de Zapallo, es una de las columnas más firmes y estables en la música infantil. Con una historia prolífica en cuanto a composición original, recopilación de material y grabación de discos desde los inicios de la década de 1980, sus canciones dibujaron la escenografía colorida y construyeron la imaginería para sucesivas generaciones de niños.

Matraz

Matraz es uno de las bandas fundamentales de la oleada del rock progresivo chileno de la generación de los '90, que tomó influencias de los clásicos del género y lo conectó con influencias locales poderosas como la de Fulano. Inicialmente un cuarteto de rock que incorporó elementos de la música docta, la fusión, la vanguardia e incluso el jazz, su fisonomía definitiva quedó supeditada a la presencia de la sólida cantante Loreto Chaparro, quien grabó el disco Gritaré (2004).

José 'Pepe' Vergara

A pesar de que nunca desarrolló una trayectoria como líder, José Pepe Vergara es uno de los trompetistas más múltiples en diversas escenas musicales desde comienzos de los ’90. Un nombre recurrente en sesiones, grabaciones, orquestaciones y series en vivo como soporte de artistas e integrante de una camada de trompetas funcionales que van desde las orquestas televisivas y big bands swing y latin jazz, hasta pequeños grupos pop y funk: Gustavo Bosch, Cristián Muñoz, Patricio Pailamilla y el jazzista Sebastián Jordán entre sus nombres más comunes.

Andrés Márquez

Andrés Márquez fue uno de los integrantes históricos de Illapu, y una de sus voces principales, hasta 1997, cuando se retiró para ser candidato a diputado por el Partido por la Democracia. Su derrota electoral, sin embargo, no lo llevó de regreso al grupo, y emprendió una historia solista traducida en un disco para Alerce. Su carrera artística se ha alternado con su trabajo político, encauzado un tiempo como concejal por Cerro Navia. Andrés Márquez es uno de los hermanos Márquez Bugueño que han conformado el eje histórico de Illapu, y estuvo en el conjunto desde 1975, acompañándolos durante todo su exilio y su período de mayor popularidad, en los años 90. Como una de las voces principales del conjunto, también fue clave a la hora de la composición, en un oficio que demostró en su álbum solista La vida es más.

Los Ex

Temáticas femeninas y sociales, coordenadas clásicas de banda rock y un sonido rabioso son los ingredientes iniciales de Ex. La banda fue la sucesión natural de Barracos, en el que a principios de los '90 se ocuparon Colombina Parra y Pablo Ugarte. pero con un sonido más duro y con Colombina (hija del poeta Nicanor Parra, y sobrina de Violeta), como vocalista y compositora. La banda fue una de las propuestas más interesantes de la prolífica escena rockera de los años '90. Tras un receso de varios años se rearticularon el 2004, en una segunda época que hacia el año 2015 se comenzó a apagar naturalmente.