2010
Formado por compositores de la Universidad de Chile Bernarda Castillo, José Castro y Andrés Mondaca, Wachún se organizó como un proyecto de música para la primera infancia, centrado en la difusión de los derechos de los niños y su participación. En 2018 se integró la actriz Josefa López para completar este elenco final, que ha participado decisivamente en espacios musicales, de educación y divulgación como integrantes de Crin Chile. Ese mismo año estuvieron en Feria Internacional del Libro de Santiago y la Feria Pulsar, y en 2019 lo hicieron en el FamFest, con coloridas puestas en escena que incluyen canciones, narración de historias, juegos y marionetas. Su primer disco es Melodías infantiles (2018), un trabajo que se desprendió de las instancias de participación que los músicos tuvieron con niños, recogiendo sus experiencias y vivencias para la elaboración de contenidos en sus canciones. Del mismo modo, en sus conciertos Wachún desarrolla escénicamente ese mismo sentido de la participación con la audiencia infantil.
Don Barbarroja es un conjunto de música infantil que basa su repertorio y puesta en escena a partir de material poético chileno para niños. Fue formado alrededor del músico y compositor Leonardo Fontencilla, quien durante toda la década de 2010 integró el grupo de fusión Bombyx Mori. Un disco suyo titulado Estrellamar (2010) se basó en el libro Poemas infantiles (1965), de Efraín Barquero, y la recepción fue tal que Fontecilla organizó una agrupación para continuar con el proyecto de poemas del Premio Nacional de Literatura de 2008. Fue el punto de partida para uno de los conjuntos de este circuito musical sugidos en la década de 2010: Paztitas, Mosquitas Muertas o Los Patapelá.
Las artes plásticas y visuales fueron la formación académica de Silvio Paredes y en varios sentidos su trabajo en el campo de la música se ha situado en la búsqueda por aplicar algunos de los conceptos allí aprendidos a piezas sonoras, bandas y discos. El bajo eléctrico y el stick han sido los principales instrumentos de trabajo para uno de los fundadores del grupo Electrodomésticos, que también integró agrupaciones pop de distinta época, como Primeros Auxilios en los '80 y Los Mismos en los '90 y 2000, del que también fue fundador, compositor y conceptualizador. Como nombre propio ha desarrollado una búsqueda, también ramificada hacia la electrónica experimental, la electrónica de ambientes, el pop y la performance.
Saxofonista alto y flautista, compositor, integrante del grupo de fusión Motete y además geólogo, Sergio Joaquín Olivares es un exponente del jazz contemporáneo en el norte. El paisaje del desierto de Atacama, la ciudad de Copiapó donde nació y se formó como músico y la inmensidad de la geografía en ese territorio han estado presentes en su historia musical, hasta desembocar en su primer álbum, Subducción (2023), un trabajo para cuarteto donde él reúne sus mundos de la música y la geología.
Cantora de La Araucanía, nacida, criada y con una vida adulta en Collipulli, tras un paso por la capital, experiencia que la llevó a escribir la canción "No me vuelvo pa Santiago". Su música intuitiva, lejos de los rigores académicos y un canto libre sin depuraciones formales, se ha inspirado en la defensa de las causas mapuches y presenta un borde aguerrido de la canción de protesta ante las desigualdades sociales de su tiempo. Además se conecta en la naturaleza sureña y la "mapu", voz mapudungún para referirse a la tierra. Una de sus canciones más resonantes es "La conquistada de América".
Cantante, guitarrista, compositor y productor son roles que han concentrado la atención de Javier Barría desde comienzos del siglo XXI, cuando se convirtió en uno de los primeros músicos chilenos que difundió su trabajo a través de soportes digitales. Inquieto y prolífico autor de discos que transitan por los amplios márgenes de la cantautoría y el pop, su huella puede encontrarse también en grabaciones de múltiples artistas chilenos y latinoamericanos.
Nacido en el Cerro Barón y formado en el trajín de la bohemia porteña de los años '40, Hernán Bahamondes ha sido considerado, junto con Rafael Berríos, un padre del acordeón folclórico al dotar de protagonismo al instrumento en la cueca. A Santiago llegó a sus 18 años y con mayor presencia desde la década de los '60 fue marcando una múltiple participación en lotes y elencos. Su nombre y su sonido se escucharon en agrupaciones diversas, como Los Labradores, Los Granjeros, Los Puntillanos, Los Caporales y una versión de los años '70 de Fiesta Linda, además de tocar, grabar y acompañar a cantores como Héctor Pavez, Hilda Parra, Tumbaíto o el Dúo Mesías-Lizama. Habitante de la comuna santiaguina de Lo Espejo, desde 2012 un Festival de Acordeón llevó su nombre en la zona sur de la capital.
Cantante romántica, de pop latino y con incursiones en la música urbana de fin de la década de 2010, María José Meza se inició a los 15 años como sesionista y corista de figuras como Luis Jara, Buddy Richard y Américo, además de acompañar a otros nombres de la canción latina como Diego Torres y la española Isabel Pantoja. En ese campo, también integró orquestas televisivas y actuó en el Festival de Viña del Mar durante seis temporadas. Como nombre propio desde 2017, y un cambio de marca musical al de Margus, Meza apareció enarbolando una defensa de género, desde la femeneidad, la fuerza y la resiliencia. en canciones como "Bancarrota", que escribió para el disco Mala hierba (2019). En tanto, su single "Muero de amor" llegó ese mismo año a formar parte de la banda sonora de la teleserie "La reina de Franklin".
Tres músicos jóvenes pero de enorme experiencia se asociaron en Los Bipolares poco después de comenzar a trabajar juntos en Inti-Illimani Histórico. Entre otras bandas, Camilo Salinas había pasado ya por los Pettinellis, Los Tres y Ángel Parra Trío; Fernando Julio fue integrante de Javiera & Los Imposibles; y Danilo Donoso apoyó en vivo a Anita Tijoux y a grupos como Bizikleta.
"Solo mío" y "Alma" fueron las primeras canciones que Kimberly Sepúlveda puso en un circuito de música pop juvenil hacia 2017. Con 20 años comenzó a aparecer con el nombre artístico de Kim Queenland (el apellido irlandés de una de sus abuelas), luego de un período de formación como cantante en festivales, difusión de canciones y covers a través de YouTube, lo que le valió una audiencia múltiple en redes sociales, y también de instrucción formal con la profesora Alicia Puccio o en la Escuela Moderna de Música. Además, Sepúlveda tuvo figuración en concursos radiales y televisivos, como "Mi nombre es". En 2023 lanzó el disco EP de seis canciones Pequeño eterno, donde dio un paso desde el pop adolescente a una balada pop y canciones de pista de baile de mayor elaboración. Ello derivó primeramente en un nuevo trabajo, un álbum opuesto en términos de extensión. Con 22 temas, El fantasma de Kim (2024) fue un disco confesional casi conceptual acerca de episodios de su vida, donde ella combinaba testimonios relatados con canciones pop.
Fenomenal saxofonista alto surgido desde los talleres de jazz e improvisación dictados por el pianista británico Martin Joseph en 2001. Edén Carrasco se transformó meteóricamente en el gran hallazgo del jazz de vanguardia y la improvisación liberada a través de sus solos exploratorios, amplio manejo de los conceptos de ruido y silencio y también la técnica de respiración circular, uno de sus rasgos más representativos al momento de tocar. Desde fines de la década de los 2000 ha venido desarrollando proyectos espontáneos de improvisación junto a músicos argentinos, peruanos, austríacos o japoneses, que han quedado registrados en una saga de álbumes donde se captura la esencia de la música creada en "el aquí y el ahora".
Desde que apareció por primera en un escenario en Chile —en el Teatro Italia, en 2002— Diego Manuschevich instaló una dinámica solística que sacudió a las audiencias y a los propios músicos de jazz, con un discurso, un lenguaje y una fortaleza que lo convirtió en uno de los improvisadores más poderosos que se hubieran visto entonces. Manuschevich es uno de los principales cultores del free jazz, el avant-garde y la improvisación libre, como intérprete de saxofones sopranino, alto y tenor, además de clarinete y clarón.
Cantante y autora de balada pop, Cari Monteci debutó con un disco EP de cinco canciones románticas reunidas en Mi alma (2017). Alumna de canto de Francesca Ancarola en la Universidad de Las Américas, y con referencias musicales que van entre Demi Lovato a Alejandro Sanz y Luis Fonsi, ha direccionado su creación a la autoría de material propio centrado en vivencias alrededor del amor. Con banda de apoyo y con guitarra acústica, sus canciones más difundidas son "Eres tú", "Melodías del alma" y "A 10 km de mí". También jugadora amateur de fútbol, en 2018 escribió la canción "Vamos niñas", que fue adoptada por la selección chilena femenina que jugó el Mundial de Fútbol al año siguiente en Francia.
Planeta No es una banda pop de Concepción, liderada por el guitarrista Gonzalo García, quien junto al bajista de Dënver, Camilo Molina, y el baterista de Ases Falsos, Juan Pablo Marín, se conformaron como banda cuando los tres eran estudiantes de música. Fueron llegando paulatinamente a Santiago, y en el 2014 – tras su paso por las Escuelas de Rock- lanzaron el EP Matucana, producido por el dúo DeJaneiros. Su inclusión en el Sello Azul al 2015, les permitió editar su primer LP, Odio, producido en parte por Álex Anwandter. Su paso por Lollapalooza el 2016, su participación en el festival musical Primavera Sound en Barcelona, y un intenso trabajo en vivo anteceden al proceso de grabación de un segundo disco, que ellos han proyectado para fines del 2016.
El pianista, compositor, productor y líder de proyectos Cristóbal Rey hizo un recorrido desde la música soul y funk de su juventud a la creación de una música acústica de cámara de inspiración latinoamericana en su primera madurez. Fue alumno de piano del jazzista Mario Lecaros y en esa primera edad, con los modelos de agrupaciones de acid jazz como Incognito o Brand New Heavies, Rey encabezó el grupo Octopus King. El nombre es una representación de su propia identidad, ya que Rey era conocido como Pulpo (la traducción al inglés de Pulpo Rey define esa marca).
La intensidad de un pop rítmico y colorido, hecho para la pista de baile, ha marcado la primera aproximación de Pilar Aragón en la música, una solista que apareció en la escena a los 22 años con canciones de estética discoteque como "Sensacional", la evidente demostración de su atrevimiento e ímpetu juveniles. Nacida en Cuba de padres chilenos y residente en Chile desde sus diez años, la cantante y autora fue alumna del colegio artístico Leonardo Da Vinci. También cuenta con estudios de piano y danza. Ello le dio herramientas tanto para la composición de canciones como para la puesta en escena de sus primeros conciertos. Inspirada en figuras del pop, el R&B y la música dance de su época, como Bruno Mars, Jessie J, Beyonce o Joss Stone, además de una influencia de las chilenas Mamma Soul, Aragón desarrolló así su propuesta musical. Su álbum debut, Sígueme el rumbo (2015), fue producido por Pablo Stipicic y Nicolás Alba y allí desplegó canciones pop como "Hasta saber quién eres", "Sígueme el rumbo", "Parece ficción" y la misma "Sensacional", además de baladas como "Creo".
En años en que el rock pesado en Chile tendió a alinearse en bandos muy diferenciados apareció Weichafe, un potente trío encomendado a la vieja escuela rockera en busca de una definición musical propia. Así tuvo una carrera productiva y ascendente, concluida en el año 2008 en medio de cierta incomprensión del medio. Lo dijeron ellos muchas veces: "Muy popero para los metaleros, muy pesado para los poperos, demasiado conocido para los alternativos y desconocidos para las masas". A fines de 2014 un concierto en el Teatro Caupolicán marcó el reinicio de su historia.
Lillyput es el grupo que el popstar Pablo Holman presentó en 2010, una vez que su grupo vocal Kudai se disolvió. Para entonces el cantante ya era veinteañero y en consecuencia decidió alejarse de la figura genérica del adolescente, practicando un rock melódico y muy severo, con referencias a bandas como Tokyo Hotel, Deftones o Slipknot. Se unieron a Holman el guitarrista Christopher Menhey y el baterista Francisco Salinas, músicos chilenos que lo conocieron en México, donde estaban radicados para cuando el grupo Kudai se estableció allí en plan de internacionalización. Holman lideró el nuevo proyecto y radicalizó la oscura apariencia emocore y dark que lo había caracterizado en el último período con Kudai, luciendo vistosos piercing y tatuajes. Así terminó por quedarse con el nombre del grupo que una de las cantantes de Kudai, la ecuatoriana Gabriela Villalba, había anunciado como su siguiente proyecto, pero del que finalmente desistió para seguir una carrera solista. Lillyput trabajó con el experimentado productor Koko Stambuk e inició una golpeadora campaña publicitaria a través de Facebook y con apenas una canción difundida, “Dejarte atrás”, reunió a más de 40 mil seguidores en la red social.
Dos momentos de la historia musical chilena se encuentran en Santiago del Nuevo Extremo. El grupo comenzó entre 1977 en circuitos universitarios, con un sonido acústico centrado en la guitarra, y terminó experimentando con teclados y saxos, casi una década después. Fundamentales en los circuitos antidictatoriales, el grupo llegó curiosamente dos veces al Festival de Viña del Mar y dejó varios clásicos de ese tiempo, como "A mi ciudad" o "Simplemente". Tras la edición de tres cassettes, en 1986 se disolvieron y todos sus músicos siguieron activos por separado. A partir de 1998, sin embargo, el grupo se reunió, en un proceso que ha tenido recesos, pero que mantiene saludable el mismo espíritu inquieto que los distinguió en sus primeros años.
Un disco del grupo Sol y Medianoche lleva su nombre: América Paz. Fue publicado en 1990, un año después del nacimiento de América Paz Soto Domínguez, hija de los músicos de esa banda de rock de raíz folclórica, el bajista Jorge Soto y la cantante Sol Domínguez. Virtuosa solista del bajo activo de seis cuerdas, versátil en los lenguajes del rock, el pop, la fusión, la música progresiva, el funk y el metal, América Paz llegó a ser calificada como "la dama de hierro del bajo".