Quinteto del Revés
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Quinteto del Revés
Quinteto del Revés es una agrupación cultora del "tango nuevo", denominación que se estableció desde la metrópolis de Buenos Aires para identificar a una corriente de tango en el siglo XXI post piazzolliana. Liderado por el contrabajista Rodrigo Ugarte y con varias formaciones desde 2010, el conjunto asimiló como propio ese concepto que tomaba el lenguaje del tango y sus recursos como un punto de partida para la elaboración de una propuesta musical contemporánea de mayor apertura. Quinteto del Revés fue parte de una escena que marcaría cierta reaparición del tango. Si bien tomaba las centenarias raíces de la música, el baile y la cultura popular, se ha opuesto a la idea del tango de postal o de exportación.
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Integrantes
Rodrigo Ugarte, contrabajo (2010 - •)
Edgard Galo Ugarte, guitarra (2010 - 2015)
Cristián Molina, bandoneón (2010 - 2015)
Jaime Flores, violín (2010 - 2013)
Milena Viertel, piano (2010 - 2011)
Genaro Prieto, voz (2010 - •)
Hugo Cruz, voz (2010 - •)
Germán Toledo, piano (2011 - 2016)
Rocío Acosta, violín (2013 - 2019)
Rodolfo Jorquera, bandoneón (2015 - •)
Felipe Muñoz, guitarra (2015 - •)
Diego Castro, violín (2019 - 2020)
Diego Ortiz, piano (2016 - 2018)
Camilo Orellana, piano (2018)
Bruno Simonetti, piano (2018 - •)
Paula Rosales, violín (2020 - •)
Iñigo Díaz
Esa escena de las décadas de 2010 y 2020 fue tomando cuerpo poco a poco en distintas dimensiones, con pequeñas agrupaciones, como el cuarteto A Contramano, el quinteto Maldito Tango o La Revancha, además de agrupaciones mayores como la Orquesta Típica La Popular. De cierto modo el tango que había sido protagónico en la música chilena, principalmente en Santiago y Valparaíso, había desaparecido como práctica musical y quedaba reducido a una memoria, pero retomó un curso suspendido como "tango nuevo". El Quinteto del Revés tomó su nombre de la idea de una vuelta del tango, un revés para esta música.
El contrabajiasta Rodrigo Ugarte, el guitarrista Edgard Ugarte, el bandoneonista Cristián Molina y el violinista Jaime Flores integraron la formación original, a la que se uniría más adelante la pianista Milena Viertel. El grupo comenzó a probar en la creación de una música desprejuiciada y sostenida en la metodología simple del “ensayo-error”. De este modo se fue aproximando al tango del siglo XXI, con referentes como la argentina Orquesta Típica Fernández Fierro y otras agrupaciones en esta línea, 34 Puñaladas, Tape Rubín o Astillero: un movimiento al otro lado de la cordillera con el que Rodrigo Ugarte, al frente del quinteto chileno, se reconocía estética y políticamente.
Sus primeros álbumes son Tango de porfía (2018) y De tango y otras cicatrices (2023), cada uno con sucesivas formaciones de quinteto con bandoneón, violín, guitarra eléctrica, piano y contrabajo. además de distintas voces que se han unido al proyecto.