Fusión latinoamericana

Más un instinto que un estilo, más una tendencia múltiple que un movimiento formal, la fusión latinoamericana es una expresión que permite designar los diversos resultados que generaciones de creadores, músicos y grupos chilenos han obtenido durante cinco décadas a partir del cruce entre las ricas fuentes de la música del continente adoptadas en Chile. Como método y espíritu tiene una genealogía que puede remontarse a los intentos de folclor panamericanista previos al Neofolklore de los '60, y que luego pasa por la fusión de conjuntos de la Nueva Canción Chilena, se mezcla con el instinto del rock y llega hasta compositores, intérpretes y conjuntos de la actualidad, abiertos al jazz, la música basileña y las raíces europeas.

Pedro Greene

Transversalmente a la sucesión de estilos y décadas de tránsito en la música popular chilena está un baterista como Pedro Greene. Un solista que fue desde la versión adolescente de los Blops hasta la madurez de La Marraqueta, engrosando en su bitácora una múltiple militancia en proyectos abiertos, con participación en ensambles experimentales europeos y activa presencia entre los músicos nacionales de la generación del toque de queda que subieron el volumen a la música de los '70 y '80.

Sonámbulo

El reencuentro de dos músicos del desaparecido grupo pop-rock La Bicicleta posibilitó la aparición de un nuevo ensamble en la música de fusión de los años 2000, inspirada tanto en el folclor latinoamericano, como en la world music y el jazz. Sonámbulo se ubicó así junto a agrupaciones como los capitalinos Fractal o los porteños Sala del Espejo, con música de cuidados arreglos, su apertura de la paleta de colores y su repaso de ritmos e instrumentación de latitudes lejanas unas de otras.

Camila Vaccaro

Compositora, autora, cantante, acordeonista, pianista y jaranera, Camila Vaccaro es parte de una comunidad de músicos de librepensamiento creativo, formados en la Universidad de Chile, aunque con proximidad a la música popular y acción fuera de la academia, que además han elaborado diversas formas de fusión contemporánea. En su caso, desde la deconstrucción del folclor, junto con una poesía tajante que derivó en discos-manifiesto como La bruja y Drama dramática, que le otorgó un Premio Pulsar en 2024. Ambos trabajos marcaron su primera época como solista tras su paso por el grupo de cámara Merkén.

Tizana

Son distintas fuentes musicales las que acuden a Tizana, el grupo que debe su nombre a una bebida natural medicinal, que en sus canciones cruza la cueca, la cumbia y el rock, y que como sello cuenta con un marcado protagonismo de la percusión africana. Dos discos editados hasta 2012 marcan una historia que ha tenido distintos períodos de intensidad, pero que ha contado con un importante actividad en vivo y sencillos radiales, como "Daño".

Luz Cuadros

Clarinetista en su origen, luego saxofonista alto y en ocasiones sopranista, Luz Cuadros ha transitado por distintos derroteros musicales, primero como sidewoman y sesionista de proyectos de fusión, música latinoamericana, pop y cumbia, hasta estrenar un perfil como líder y compositora de una música de enfoque moderno que atraviesa los territorios del jazz, las fusiones y la música docta contemporánea. Su primer trabajo en esta línea es Desestructura (2017), donde ella escribió obras para noneto.

Angulart

Banda asociada al rock progresivo que durante su historia operó sobre una particular mixtura del neoprog con elementos estéticos obtenidos del folclor y la tradición de la música chilena. Sus integrantes se conocieron a través de un foro hispano de rock progresivo en internet, y hacia el año 2003 tenían ya una banda promisoria de la escena, gracias a su impecable técnica instrumental, una precisa manera de componer y un trabajo de acabados textos en sus canciones. Su único disco, Donde renacen las horas (2004), de etiqueta Mylodon Records, obtuvo elogiosas críticas que sin embargo no evitaron la salida de algunos integrantes y una creciente inestabilidad en su trayectoria.

Paz Quintana

Paz Quintana es el rostro y la voz de Tizana, la banda de fusión que ella formó a mediados de los 2000 en la Escuela Moderna de Música, junto a Natalia Contesse. Desde esa plataforma, la compositora y cantante desarrolló un amplio trabajo durante su primera etapa creativa en Chile, que entonces completó dos discos además de la activa participación en circuito en vivo vinculado a la fusión latina, el pop y la nueva cumbia. Tizana, sin embargo, recorrió un camino distinto al de su propuesta solista, en el que Paz Quintana ha marcado su posición como compositora, productora, cantautora y colaboradora de otros músicos del medio.

Carla Casas-Cordero

Parte de una generación de cantautoras que retoman la inspiración en la tierra, las raíces y los folclores chilenos, donde figuran Giovanna Arce, Amapola Puz, Florencia Gallardo, Tamara Quijada, Daniela Millaleo o Nacha Haase, Carla Casas-Cordero se estrenó como voz y nombre propio en el disco El río de la vida (2017), resultado de sus primeros ensayos de creación de canciones y de sus viajes por Guatemala, Honduras y México. Viñamarina de nacimiento y fonoaudióloga de profesión, también realizó estudios de guitarra clásica en el Conservatorio de la U. Católica de Valparaíso, aunque terminó próxima al folclor y la música popular, con influencias que van desde Violeta Parra a Mazapán. A su conocimiento de esas guitarras clásica y folclórica, Casas-Cordero sumó la creación de material propio y así comenzó a escribir canciones que tuvieron, en su consideración, "la intención de sanar". Esa primera carpeta fue denominada "Canciones medicina".

Matato'a

Matato'a —que en lengua Rapa Nui significa «la mirada del guerrero»— es un grupo de música y danza de Isla de Pascua que desde 1996 fusiona los instrumentos y composiciones tradicionales del folclor de Rapa Nui con la música polinésica, latinoamericana, el reggae y rock. Es el grupo que grabó "E nua e koro", la canción principal de la teleserie "Iorana" (1997), de TVN, que fue el punto de partida de una carrera que han extendido por cinco discos y varias actuaciones internacionales.

Juana Fe

Juana Fe es una banda musical, pero sus fundamentos, su inspiración, y sus formas de trabajo trascienden el quehacer estrictamente artístico, y son – por eso- uno de los proyecto más llamativos de la escena musical chilena de los 2000. Conocidos masivamente por su canción "Callejero" del año 2007, el conjunto desarrolla los sonidos tropicales chilenos y continentales, se han presentado intensamente en Chile, y han viajado varias veces al extranjero. Gestores del fundamental sello y estudio La makinita, el 2014 vieron partir a su cantante y fundador, Juanito Ayala. Sin él, el conjunto incorporó una nueva voz y ha continuado con su historia.

Surreal

Influenciado por la psicodelia de la década de los '70, desde Sun Ra y el último John Coltrane hasta bandas de británicas rock como Soft Machine y Gong, Julián Romero Parada adoptó el nombre de Surreal para un proyecto creativo situado en una música experimental. Su propuesta de composición desde el bajo eléctrico transita por diversos territorios, desde el jazz avant-garde, la fusión, la música progresiva y la improvisación liberada hasta desembocar en los misterios de las músicas ancestrales del sur de Chile, de donde él proviene. Su primer trabajo en esta línea es Delirio místico (2021).

Kuervos del Sur

Partieron siendo una banda llamativa por la poderosa conjunción de rock y sonidos de raíz que le dieron a su sonido. Una banda asociada inicialmente al tipo de fusión escuela-Jaivas, y con alcance entre oídos ya iniciados a la electricidad de cariz sudamericano. Sin embargo, el tiempo fue haciendo crecer a Kuervos del Sur, cruzando su trabajo con el de otros grandes talentos nacionales, y ampliando su audiencia geográfica y generacionalmente. Es uno de los conjuntos importantes del rock chileno post-2000, de constante actividad en vivo y grabaciones contundentes, en una lógica de persistente y ambiciosa autogestión.

Vane Bravo

Originalmente cantante y guitarrista del grupo talquino de fusión y jazz All Jazzera, Vanesa Bravo emprendió un camino como solista y líder de sus propios proyectos, que se centran en ese punto intermedio entre la canción popular y el formato instrumental del trío jazzístico, incorporando a su música todo tipo de ingredientes externos, desde el folk al bolero y desde la esencia musical del swing a un marcado enfoque de humor y sarcasmo en sus canciones. En ese derrotero, Bravo organizó su primer trío maulino, donde pasó definitivamente al contrabajo en una exploración del canto y la ejecución del instrumento en simultáneo, junto a los músicos Lalo Garrido (piano) y Nicolás Soto (batería), otros compañeros en la misma All Jazzera. Su primer disco es Más o menos (2023).

Kalimarimba

El nombre Kalimarimba es una contracción fonética que permite unir en una sola palabra los dos instrumentos que le dieron el primer sonido al grupo de fusiones étnicas liderado por el percusionista argentino Piny Levalle y la bailarina chilena Claudia Campusano: la kalimba y la marimba. El conjunto ha sido un activo ejemplar de las músicas del mundo en Chile a los largo de dos décadas.

Álvaro Prieto

Durante tres años y dos álbumes Álvaro Prieto fue Tribi, voz principal de Los Miserables y autor de dos de los más difundidos títulos de su cancionero: "N.N." y "Progreso". Pero diversas decisiones personales lo llevaron hacia 1999 a dejar primero el grupo y, al poco tiempo, también su vida capitalina. Tras integrar tres breves proyectos (Chechango Social Club, Blest y Flores Prieto), Prieto se instaló en Alcohuaz, un pueblo en el Valle del Elqui, Cuarta Región.

Verdevioleta

El proyecto de unión de las tradiciones de la poesía y canto popular de Violeta Parra y la escuela de música contemporánea brasileña de Hermeto Pascoal fue también una vinculación entre colores y entre sensibilidades musicales. Verde y violeta: la multi-vientista carioca Aline Gonçalves y el guitarrista porteño Simón Schriever se conocieron en 2004 en los talleres de arreglo y armonía de Itiberê Zwarg, histórico sideman de Pascoal y se conectaron además en la obra avant-garde de Parra contenida en el álbum Composiciones para guitarra (1999).

Natalia Corvetto

La coquimbana Natalia Corvetto es parte de una extensa línea de cultoras de una música moderna, una generación de cantantes que tiene a la penquista Susana Lépez, la temuquense Giovanna Arce, la chillaneja Cecilia Gutiérrez o la capitalina Miloska Valero, entre otras damas. Su propuesta se fundamenta en los ritmos de la música popular latinoamericana, el bolero y la bossa nova como columnas centrales, y desde allí da muestras de transformaciones que la han conducido hacia el jazz, el pop, el soul y la fusión. Su primer disco es Vuelo (2017).

Daniel Gazmuri

Como intérprete del bajo tenor de cinco cuerdas, Daniel Gazmuri ha observado las raíces de la música latinoamericana desde los formatos y las herramientas del jazz en una fusión personal, sureña desde su sentido más arraigado, posible de apreciar en su primer álbum, Camino (2020). Allí lideró un cuarteto con los hermanos jazzistas Mauricio Rodríguez (guitarra) y Daniel Rodríguez (batería), además de la cantante Javiera Abufhele.

Juan Antonio Sánchez

Juan Antonio Chicoria Sánchez es un puntal en la fusión latinoamericana que desde la década de 1990 vino a completar la línea iniciada por la Nueva Canción Chilena. Como solista de la guitarra contemporánea, de cámara y fusión fue parte de una tríada donde también se pueden identificar a Antonio Restucci y Alberto Cumplido. Chicoria participó de varios mundos musicales, el folclor en primera instancia pero también las corrientes modernas de la música erudita brasileña, el flamenco y la guitarra clásica latinoamericana, dejando una serie de partituras como compositor, sobre todo sus reconocidas tonadas de cámara. A ello, en una etapa posterior de su creación, se incorporó también al mundo de la música para la infancia.