Iñigo Díaz

Si bien los ensayos preliminares para el proyecto se iniciaron en 1988 como laboratorio, el sexteto se formó y salió a tocar en 1992. El grupo estaba liderado por el médico y trompetista Claudio Zamorano, quien había sido alumno de Luis Huaso Aránguiz en 1985 y más adelante de Víctor Durán. El elenco original estuvo formado entonces por Claudio Zamorano (trompeta), Renato Muñoz (clarinete), Peter Kennedy (piano), Fernando Verdugo (guitarra), Walter Soto (contrabajo) y Álvaro Ponce (batería), muchos de ellos músicos con otras profesiones, aficionados al jazz y con cultura musical avanzada, como fue habitual en los tiempos de formación del jazz chileno. A lo largo de sus épocas Seis a la Dixie alteró su formación con nuevos integrantes, y entre esos colaboradores también destaca la participación de figuras como la cantante Rita Góngora, el guitarrista Fernando Otárola, el clarinetista Boris Ortiz y sobre todo al trombonista estelar y múltiple Héctor Parquímetro Briceño.

Con repertorios clásicos, que van desde los reconocidos work songs y los spirituals hasta el blues y las baladas, siempre con un enfoque dixieland, Seis a la Dixie tuvo un estreno discográfico con el álbum Seis a la Dixie, grabado en los mismos estudios de la casa del Club de Jazz de José Pedro Alessandri en Ñuñoa. Presentó piezas referenciales de ese cancionero expuesto en sus conciertos: "Tiger rag", "Way down yonder New Orleans", "Ory’s creole trombone", "Wolvering blues" y "Jazz me blues". La portada del disco fue también un testimonio de época, dado que incluía caricaturas de los músicos elaboradas por el baterista Jorge Carvallo, por entonces músico de la Retaguardia Jazz Band y autor de una colección histórica de retratos que han pertenecido al Club de Jazz. En adelante, las siguientes publicaciones fonográficas llevarían en las cubiertas el sello de Jorcar (su pseudónimo como dibujante).

El año 2000, Seis a la Dixie realizó una primera gira de conciertos que se efectuó en Perú, y ya en 2003 fue número jazzístico en las Semanas Musicales de Frutillar. De esa experiencia aparece también un álbum de doble volumen, titulado, simplemente, 35ª Semanas Musicales de Frutillar. Entonces ya se habían integrado figuras nuevas al elenco, como el trombonista Parquímetro Briceño y la histórica cantante Rita Góngora, quien puso la voz en nuevos repertorios que Seis a la Dixie, una agrupación instrumental, no había podido mostrar en esas dimensiones. El grupo repetiría la visita a Frutillar en 2006 y al año siguiente emprendió un segundo viaje fuera del país, esta vez para actuar en el Festival Internacional de Jazz de Quito, en Ecuador. En 2007 publicó un tercer álbum de repertorios tradicionales, titulado The dixieland jazz band.