Camila Vaccaro

Compositora, autora, cantante, acordeonista, pianista y jaranera, Camila Vaccaro es parte de una comunidad de músicos de librepensamiento creativo, formados en la Universidad de Chile, aunque con proximidad a la música popular y acción fuera de la academia, que además han elaborado diversas formas de fusión contemporánea. En su caso, desde la deconstrucción del folclor, junto con una poesía tajante que derivó en discos-manifiesto como La bruja y Drama dramática. Ambos trabajos marcaron su primera época como solista tras su paso por el grupo de cámara Merkén.

Fechas

Santiago - 28 de marzo de 1984

Región de origen

Metropolitana de Santiago

Décadas

2010 |2020 |

Géneros

Grupos

Iñigo Díaz

Camila Vaccaro tuvo una primera formación como pianista clásica, desde su niñez y hasta los 22 años, con la maestra Gloria Inostroza. En paralelo estudiaba en la Facultad de Artes de la U. de Chile, donde conoció a los músicos que la rodearían durante la década de 2000. Y en ese recorrido, Vaccaro fue una de las fundadoras del conjunto Merkén, a su vez resultado del Taller de Musica Latinoamericana, dictado por el compositor Claudio Acevedo en la misma facultad.

Esa época estuvo marcada por la participación de Camila Vaccaro en la definición de una obra que desde la música de cámara accedía a la raíz del folclor y lo proyectaba en una transformación. Es el mismo tiempo en que ella descubrió el acordeón y comenzó a explorarlo desde el autoaprendizaje. Así se uniría a una nueva oleada de acordeonistas femeninas que se consolidaron en la década de 2010: Valeria Moraga, Pascuala Ilabaca, Javiera Benavides y Natalia Cristina, entre otras.

Camila Vaccaro escribió piezas para el repertorio de Merkén como "El grito", "Tusti mú" y "La maravilla" (del disco Tutsi mú, 2014), y "Carta a Cristóbal", "Me vuelvo arena" y "La Carolina" (de Brindo a la muerte, 2016). Además tuvo colaboraciones con Juana Fe y con otras figuras femeninas como Natalia Contesse, Paz Quintana, Tatiana Passy Lucero, Rocío Peña, Pickúa Martínez o las argentinas Sofía Viola y Luciana Jury. En 2018, en los últimos momentos de acción de Merkén, inició una ruta musical como solista que se convertiría en una obra más agresiva desde el rock, la experimentación y un fuerte componente escénico y poético, con instrumentos electrónicos y el uso de la jarana mexicana, cordófono que amplió su rango y le permitió tocar músicas nuevas desde el folclor sin considerarse folclorista.

Actualizado el 11 de abril de 2023