Eduardo Yáñez

Cantautor popular en su definición más estricta —como seña de creación y de vida—, Eduardo Yáñez ha estado presente en la música chilena de varias décadas, cruzando momentos y movimientos, desde la Nueva Canción hasta nuestros días. Sus referentes y principales influencias explican, en todo caso, que él elija presentarse como «un chileno de los años sesenta». Marcó un hito del canto contingente como autor de "Nuesto cobre", popularizada por la versión que grabó Quilapayún en 1972, y en los años siguientes, ya en dictadura, fue un proveedor de composiciones para intérpretes en Chile o el exilio como Isabel Parra, Patricio Manns, Inti-Illimani, Ortiga, Isabel Aldunate y Cecilia Echenique.

Fechas

Campanario (Chillán) - 18 de octubre de 1947

Región de origen

Biobío

Décadas

1960 |1970 |1980 |1990 |2000 |2010 |

Géneros

Eduardo Yáñez

Marisol García

De la UP al Canto Nuevo
Guitarrista autodidacta, Yáñez se fue interesando desde la adolescencia y de modo simultáneo en la música y la poesía. Había nacido en Campanario, un pueblo de la provincia de Ñuble, en la región del Biobío, con el ejemplo de similares intereses de parte de sus hermanos Fernando Pedro Yáñez.

Darle cauce a esa vocación creativa fue su principal motivación para trasladarse en 1970 desde el sur a Santiago, donde se inscribió en cursos de composición y guitarra clásica en el Conservatorio de la Universidad de Chile. La capital hervía entonces de actividad política y canción comprometida, y el propio Yáñez aportó de modo importante a ese fervor con su canción "Nuestro cobre", ganadora del Festival del Cantar Universitario en 1971.

La canción interesó a Quilapayún, que la grabaron como single al año siguiente, dándole su mayor exposición y pistas certeras de prestigio a su autor. El Golpe de Estado, sin embargo, interrumpió los estudios y planes de Yáñez, quien permaneció en Chile trabajando de modo clandestino para las Juventudes Comunistas. De modo paulatino, volvió a la composición y la interpretación en vivo, incorporándose de lleno al movimiento de Canto Nuevo a principios de los años ochenta. Una invitación de su hermano Pedro lo había animado a volver al canto a través del grupo El Canto de Chile, asociación de cantautores en la que se incorporaron también Dióscoro Rojas, Eduardo Peralta, Juan Carlos Pérez y Pedro Yáñez. «Fue una experiencia riquísima de autogestión», según el músico.

La publicación de su primer disco solista, en 1988, precedió un tiempo de residencia en el sur de Chile, durante el cual se ocupó en la grabación y edición de los álbumes Canta a Pablo Neruda (1993) y Corre, sueño, corre (1998). El CD Pero ¿qué reclamo yo? (2004) marcó su regreso a Santiago y decisión de mantenerse con presentaciones constantes. Su talento como cantautor ha sido reconocido por diversos músicos que han grabado sus canciones. De hecho, el primer cassette de Cecilia Echenique, Tiempo fecundo (1987), tomó su título de un tema de Yáñez.

Actualizado el 14 de marzo de 2019