Carmen Aguilera

Compositora proveniente del mundo académico, Carmen Aguilera es una de las tres exponentes femeninas del piano jazzístico contemporáneo, junto a Carmen Paz González y Carla Romero, sin considerar a Tania Naranjo, que tuvo una vida musical en Suecia. Si bien fue formada en la Universidad de Chile en la música docta, derivó en el campo del jazz, donde se desarrolló mayormente como autora. Además de contar con un catálogo de obras de cámara, ha realizado sesiones de piano solo, piano trío y quinteto, pero sobre todo en una propuesta que ha explorado los cruces entre las tradiciones del jazz y las tradiciones doctas.

Fechas

Santiago - 16 de septiembre de 1969

Región de origen

Metropolitana de Santiago

Décadas

1990 |2000 |2010 |2020 |

Géneros

Carmen Aguilera

Iñigo Díaz

Más de una década previa de trabajo obras doctas contemporánea la mantuvieron activa tras el aprendizaje con sus principales maestros, los compositores Cirilo Vila y Aliosha Solovera. Durante esa época escribió su "Oratorio a la Virgen del Carmen", una investigación etnomusical que se combinaba con música camerística. Desde 2002 trabajó con los pianistas de jazz Carlos Silva y Mario Lecaros, con quienes tomó clases y pudo desarrollar una faceta creativa fuera de las fronteras de la música de tradición escrita. Se abrió al jazz y la música popular, y en 2004 grabó Collage, un álbum doble con el que hizo un repaso a sus conocimientos musicales, incursionando, además, en el canto.

Carmen Aguilera salió del silencio del conservatorio y comenzó a operar en circuitos jazzísticos, desarrollando su propio punto de vista con respecto al trío acústico. Sobre esta línea, Aguilera publicaría un segundo trabajo (Elegancias, 2006), en el que también incorporó piezas a piano solo.

Después de temporadas de estudio en Bogotá, donde continuó con la creación de obras contemporáneas, regresó a Chile para montar sus conjuntos: primero fue un cuarteto con el saxofonista Alejandro Rivas, el contrabajista Daniel Navarrete y el baterista Roberto Zamora, y luego un piano trío con el propio Navarrete y el baterista Matías Mardones. Con este ensamble, Aguilera emprendió una siguiente etapa musical, con activas series de conciertos de cámara en salas, que derivó en el disco En espiral (2012).

Alentada por su antiguo maestro, Aliosha Solovera, Carmen Aguilera se decidió luego a acercar estos mundos distantes en que se había desarrollado: por un lado la composición académica con su catálogo de obras para instrumentos, conjuntos y ensambles, y por otro lado el jazz, el ritmo y la improvisación. En 2018 concretó la idea con el disco Pequeña suite y otras creaciones, donde escribió piezas jazzísticas breves inspiradas en los formatos clásicos, el vals, el contrapunto o la balada de jazz. Esta vez trabajó con un quinteto formado por Alejandro Rivas (saxos tenor y soprano), Karem Ruiz (saxo alto), Hugo Rojas Krumenacker (bajo) y Nicolás Ríos (batería), con quien más adelante volvería a grabar un álbum, de reducciones máximas, un diálogo de piano y batería: El sueño... (2021).

Actualizado el 10 de febrero de 2021