Jorge Leiva / Marisol García
La primera vez que Luis Chino Urquidi escribió arreglos vocales para un grupo de folclor fue con Paupalú, el trío vocal femenino que lideraba su entonces polola Paz Undurraga, y que se presentó en varios festivales folclóricos y grabó un disco sencillo con el sello Demon. Una vez con Los Cuatro Cuartos, donde los arreglos vocales eran parte del sello musical del conjunto, Urquidi forjó con ella la idea de formar un cuarteto femenino. Así nacieron las Cuatro Brujas.
Paz Undurraga, junto a Cristina Navarro y María Eugenia Peralta ya mantenían un trío vocal, que en definitiva fue la base del nuevo grupo. La pronta salida de María Eugenia Peralta, y la llegada de María Elena Infante y María Edith Casanova completó la formación. Cada una cantaba en un registro distinto –esencial para el juego armónico de voces- y además tocaban la guitarra. Con la dirección de Chino Urquidi comenzaron a montar un repertorio de canciones chilenas y latinoamericanas, que paulatinamente grabaron para el sello Demon, de Camilo Fernández, que también editaba a Los Cuatro Cuartos. La primera edición fue un sencillo con la canción litoraleña argentina "Cuando vuelvas", junto con su gran clásico, la versión de "Parabienes al revés", de Violeta Parra. Camilo Fernández llevó a las Brujas a Radio Balmaceda y ya en agosto de 1964 debutaron en radio Corporación, desde donde se hicieron ampliamente conocidas.
Editaron dos singles y un EP (un formato de tres canciones por lado, poco frecuente) y alcanzaron rotación radial y presencia en televisión. Sus canciones “Parabienes al revés” o “Adonde vas soldado”, refalosa que grabaron antes que su autor Rolando Alarcón, aparecieron en rankings y sonaron en radios. Los discos también incluían la tradicional cueca “El clavel y la rosa”, una canción que les entregó especialmente un joven Palito Ortega, “Changuito cañero”, el célebre vals peruano “Amarraditos”.
El diverso repertorio permitió al conjunto femenino viajar por Chile, y mantener un intenso trabajo en los programas radiales y en locales nocturnos, como el Nuria, donde estuvieron varias temporadas. En 1965 regresó a Chile Violeta Parra luego de cuatro años en París y al conocerlas reconoció que les que le gustaba soy versión de “Parabienes al revés”, y luego grabaron varias canciones que ella les mostró. Así lo contó Paz Undurraga: "Nos reunimos y llevamos una grabadora grande, con cintas de un cuarto de pulgada, y con Ángel o la Chabela sentados fuimos grabando, y hasta pedíamos silencio. Después lo revisábamos con el Chino, hicimos arreglos de algunas y las grabamos”. Esas grabaciones permanecieron inéditas hasta 1987, cuando las incluyeron en el disco Guitarreando la Parra.
Ese 1965 fue intenso para el cuarteto. Luego de una gira a Estados Unidos (donde Paz Undurraga y Chino Urquidi se casaron), lanzaron el disco El retorno de las brujas, llamado así justamente por su regreso, y que terminó siendo el único disco LP del conjunto y la más poderosa muestra de su historia. Mantuvieron sus presentaciones, apoyaron la grabación de “Arriba en la cordillera”, de Patricio Manns, con sus voces y con la guitarra de María Elena Infante, pero a fines de 1966 su historia se interrumpió: Uno de los integrantes de Los Cuatro Cuartos, Fernando Torti, falleció en un accidente en diciembre de ese año, y Chino Urquidi abandonó ambos proyectos. En 1967 renunció su esposa Paz Undurraga , y aunque sus compañeras mantuvieron el conjunto, con la incorporación de Mireya Verdugo y grabaron dos discos singles, en 1969 llegó a su final.
Paz Undurraga se integró a Los Bric-a-Brac, luego fue solista y condujo un programa de televisión en los años '70. El resto de las integrantes del grupo fue abandonando paulatinamente la música, hasta que en 1986 se reagruparon como Cuatro Brujas y con la formación original para editar un cassette con canciones de Violeta Parra para el sello CBS, donde incluyeron varias piezas extraídas de esa grabación de 1965. En 1998 reeditaron la grabación en formato CD y desde entonces, su funcionamiento fue intermitente, con cambios de integrantes, pero siempre con el eje fundador de Paz Undurraga y María Cristina Navarro. Estuvieron en la competencia del Festival de Viña del Mar en 1989 (con una canción de Scottie Scott), en el Festival de Olmué y en programas de televisión y en 2003 celebraron sus 40 años en el Teatro Oriente. Pero la muerte de Paz Undurraga en 2019 puso el punto final a la historia femenina del Neofolklore, hasta hoy considerada una de las más brillantes de ese momento del folclor chileno.
Actualizado el 08 de marzo de 2024