Ariel Arancibia

Ariel Arancibia
Foto: Archivo revista Ritmo

Ariel Arancibia

Uno de los más prolíficos compositores chilenos del siglo XX, Ariel Arancibia registró sobre quinientas canciones de su autoría, y no es sencillo escoger cuál es la más famosa: para elegir están los éxitos de la Nueva Ola "Dilo calladito" (Cecilia) y "La gotita" (Gloria Benavides), el éxito de clásico universitario "La ballena" (Sussy Vecky), el tema televisivo "El bailongo" (Don Francisco); y el éxito absoluto de Los Huasos Quincheros, la guaracha "El patito", entre otros. Y además está su fundamental labor como arreglador, en discos tan relevantes como Homenaje a Óscar Castro (1970), de Los Cuatro de Chile. De gran versatilidad musical, durante su carrera se dedicó a las revistas musicales, los clásicos universitarios, la televisión, el cine, el teatro, la tarea de dirección artística que desempeñó en el sello RCA Victor y la composición de música sobre poemas de Pablo Neruda, Óscar Castro, Daniel de la Vega y otros autores. Fue siete veces finalista en el Festival de Viña, donde ganó una Gaviota de Plata en 1972; y meses antes de su muerte, en 1997, fue nombrado socio emérito la Sociedad Chilena del Derecho de Autor, SCD.

Fechas

Rancagua - 16 de diciembre de 1924
- 12 de agosto de 1997

Región de origen

Libertador General Bernardo O'Higgins

Décadas

1940 |1950 |1960 |1970 |1980 |

Géneros

Grupos

Marisol García

Primer grupo: Los Flamingos
Nacido en Rancagua en 1924, Ariel Arancibia González era hijo de Arturo Arancibia Uribe, el compositor del himno de los Carabineros de Chile, y estudió música desde los seis años. A los 17 años comenzó además a estudiar actuación en el Teatro de Ensayo de la UC. Su interés por la música lo llevó a formar parte del grupo vocal Los Flamingos (1955-65), un quinteto que se inició cantando boleros como Los Ases del Pacífico y que luego derivó al fox y una línea humorística, muy apta para las presentaciones en vivo. Sin embargo, y según se consigna en Historia social de la música popular en Chile, 1950-1970, «su opción por la vida familiar lo alejó de las giras y los escenarios nocturnos, centrando su actividad en la composición».

Antes de cumplir los 35 años de edad, Arancibia había logrado cumbres de asombrosa altura. En 1956, colaboró con el arreglador Tito Lederman en la primera comedia musical grabada en Chile, Y a veces... estamos (con Sonia y Myriam, Cecilia Díaz, Luis de Castro y el colombiano Régulo Ramírez) y mucho antes impuso acaso la canción más conocida del repertorio de Los Huasos Quincheros: las coplas en ritmo de guaracha "El patito".

Entrados los años sesenta, Arancibia se convirtió en un compositor ampliamente reconocible, incluso con un espacio destacado en el ranking del "Mejor compositor" que, a partir de los votos de los lectores, elaboró en 1965 la revista Radiomanía (allí aparece el nombre de Arancibia en un Top 5 netamente chileno, en el que también figuran María Pilar Larraín, Omar Arriagada, Francisco Flores del Campo y Joaquín Prieto). A este prestigio contribuían hits tan importantes como "La gotita" y "Una lágrima" (ambas con letra de Francisco Gabito Hernández), popularizadas respectivamente por Gloria Benavides y Ginette Acevedo (quien también hizo conocida "Cuando llegue el alba"); los boleros "Una cruz", en voz de Isabel Adams, "Algo más" (Los Latinos); las graciosas "Twist del estudiante" (1962), "Los pantalones" y "La ballena" (Sussy Vecky); el fox "Juntos" (Los Dreamers); y la emocionante "Dilo calladito", que Cecilia convirtió en hit en 1963.

En los años setenta, uno de sus hitos fue el trabajo junto a Los Cuatro de Chile y los hermanos Duvauchelle en la musicalización de poesía incluida en el disco Homenaje a Óscar Castro (1970), que alcanzó sorprendentes buenas ventas gracias a piezas como "Romance de barco y junco", "Por Calle del Rey arriba" y "Para que no me olvides". Iniciado el gobierno de la Unidad Popular, Arancibia quedó en el puesto de Camilo Fernández cuando éste renunció a la dirección artística del sello RCA Víctor y éste se nacionalizó bajo la sigla IRT.

Meses antes de su muerte, en 1997, Ariel Arancibia fue nombrado socio emérito la Sociedad Chilena del Derecho de Autor, SCD. El tiempo no ha hecho sino confirmar su estatura dentro de la música popular chilena, con recientes  grabaciones de gente como Valentín Trujillo, habitual colaborador, y Ángel Parra Trío, las cuales aprovechan su enorme legado.

Actualizado el 22 de marzo de 2021