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Julianno es un nombre que escogió César Alejandro Pozos Martínez para su camino artístico, ha dicho, solo porque le gustaba. Para el apellido Sosa, en cambio, se inspiró en Alex Sosa, el enemigo de Tony Montana en la película Caracortada, de 1983, y con ese nombre hizo sus primeras canciones a los 16 años, influenciado por el trap que en ese momento, los comienzos de la década del 2010, se escuchaba muy poco en Chile.

A través de las canciones que grabó artesanalmente y subió a Internet, en 2015 se vinculó con un joven Pablo Chill-E, que como él vivía en Puente Alto y se encontraba haciendo canciones trap. “Nos hicimos hermanos”, ha dicho en muchas entrevistas. Su camino musical duró muy poco, porque en el 2016, cuando cumplió 18 años, Julianno viajó a Nueva York y dejó de hacer canciones. “¿Por qué te fuiste a Estados Unidos?” le preguntaron en el programa de Youtube del sitio Vamo a calmarno el 3 de mayo de 2020, y su respuesta fue directa: “Me vine a hacer plata. Yo hacía música antes, pero nunca pensé que iba a volver a eso. Y me vine a este país a flaitear”.

El retiro de la música, en todo caso, no se prolongó por mucho tiempo. Así lo cuenta él en libro Historia del trap en Chile (2020), de Ignacio Molina: “El Pablo siempre me decía: ‘Juli, canta hermano’. (…) Él sabe caleta hueás que yo he vivido. Hueás fomes igual, hueás que yo he pasado en mi infancia, en mi vida. Entonces ese hueón siempre me decía: ‘Vos tenís una historia que contar’”. Así fue como en 2018 Juliano Sosa volvió a lanzar canciones grabadas en Estados Unidos, pero producidas y mezcladas en Chile.

En 2019 tuvo un primer hit de popularidad con la canción “X dinero” (“Si hicimo' algo malo en la vida lo siento fue por el dinero / Que veníamos de cero / Fue por dinero te hablo de verdad / Soy de la calle y con sinceridad / Pensaba brígido de menor de edad / Buscando una mano y nadie me la da”). El trabajo con el manager y músico Poe Rilla le permitió mejor sus condiciones de grabación, y desde entonces inició una intensa producción de temas en solitario o acompañado por otros nombres del género, como Harry Nach, Polimá Westcoast, AK4:20, entre otros, y donde aparecen también numerosas canciones de amor.

En varias entrevistas a portales en Internet, Julianno Sosa ha revelado su dura infancia y el acercamiento a mundos delictuales, tal como habla en muchas de sus canciones. En febrero de 2021 las cosas fueron más lejos y estuvo cinco meses en la cárcel del condado de Morris, en Nueva Jersey. Su salida del penal está documentado en su clip “Otro día”, que representó la continuidad de su camino musical. En 2022 sumó el reguetón a su música, con la reconocida intención de ganar público, y varias de sus canciones en ese ritmo alcanzaron una alta difusión. “Cochinae”, incluida en el EP Querían perreo, estuvo entre las más altas de un año en el que también lanzó el LP Finalmente rico.