Sus filas instrumentales sustituyen las de una orquesta europea (con cuerdas, maderas, bronces) por los materiales sonoros más influyentes del folclor (quenas, sikus, tarkas, charangos, tiples, guitarras y bombos legüeros, entre otros). Cárdenas había obtenido el primer Premio Pulsar en la categoría Música Clásica, en 2015, con la partitura de "Küin", para flautas traversas y aerófonos andinos, entre otros instrumentos, pero dos años más tarde confirmó su valía como compositor al lograr otro Pulsar, ahora en la categoría Música de Raíz con su Orquesta Andina y el disco Zumbidoss. Nuevas músicas latinoamericanas (2016), donde grabó la misma obra e incoporó como solistas a una serie de músicos invitados, como el charanguista Freddy Torrealba, el flautista clásico Alejandro Lavanderos, o el concertista de guitarra Esteban Espinoza.