Camila Rioseco / Jorge Leiva

La decisión de independizarse de sus bandas previas motivó a Pedro Subercaseaux a instalarse temporalmente en México por primera vez hacia 2007. Allí comenzó su primera grabación, que tuvo a varios chilenos en sus créditos. En el disco aparecen Jorge González, y Gepe, con quien había tocado en el disco Hungría (2007), en una lógica de colaboración que acompañará todo la carrera de PedroPiedra.

Su estilo se alejó del hip-hop de sus inicios, y en Pedropiedra operó como multiinstrumentista en canciones que parecen tocadas por una banda, pero cuyas pistas electrónicas, voces, teclados, baterías y bajos fueron creados y registrados por la misma persona. Las canciones de Pedropiedra son limpias, creativas y difíciles de enmarcar en un estilo, porque en ellas une el rock y sus afluentes de una forma más mística, en la que se reconocen sonidos de rhythm & blues, un suave funk, ritmos tropicales y pop.

El lenguaje usado es simple; a veces suena rebuscado en la narración de situaciones sobre las desgracias de la vida y la naturaleza del hombre, pero al describirlas en escenarios presentes y comunes se hacen verosímiles, como en "Obrero mundial", donde aborda el personaje de un empleado víctima de un sistema que lo vuelve amnésico, o "Inteligencia dormida", una especie de autobiografía a partir de la vida escolar.

Publicado su primer disco, el músico regresó a Chile, con un regular trabajo en vivo y una tenue difusión radial, que sirvió como plataforma para un segundo trabajo, Cripta y vida, un trabajo que definió como "más sombrío" que el primero, y donde consolidó el sello de variedad de su música, con temas que van del tono acústico "De quien" al sonido bailable de "Vacaciones en el más allá", primer sencillo del disco.

Así definió la diferencia a Super45: "“Pedropiedra era un disco más ‘buenín’, muy limpio, muy claro en sonido, pulcro en todos los aspectos. Dejaba lugar a menos dudas: era mucho más equilibrado. En Cripta y vida, en cambio, tenía la idea de plantear el disco como un gráfico que subía y bajaba, con distintas intensidades, de tal manera que existiesen contrastes entre las canciones. Algunas más luminosas, otras más oscuras"

Paralelo a su condición solista, el nombre de PedroPiedra fue apareciendo con frecuencia en otros proyectos. Con Gepe y con Gonzalo Yáñez en colaboraciones recíprocas en discos y en conciertos, y como baterista de la banda de Jorge González y del conjunto que desde el  2011 muestra en vivo la música del programa 31 minutos.

Es en medio de esa agenda, que incluyó un importante circuito en el extranjero, el 2013 presentó su nuevo disco: Emanuel, producido por Alvaro Díaz (de 31 Minutos), que aunque tenía varias melodías suaves, aseguró que era el más rápido de su historia. "Lima", "Pasajero" y "Para ti" fueron algunas de las canciones que alcanzaron cierta difusión radial, muchas de ellas vestidas con muchos recursos sonoros que él mismo calificó luego  como "innecesarias".

La búsqueda de sobriedad, entonces, fue uno de los puntos de partida de su disco siguiente, titulado simplemente   Ocho, en alusión al número de canciones del disco, y también a la cantidad de años que cumplía como Pedropiedra. Adelantado con la "Balada de J. González", suerte de cariñoso homenaje a su amigo Jorge González, todo el disco fue hecho con el músico ya convertido en padre, y esa condición - lo ha dicho- marcó poderosamente las canciones.

"El new-wave, la música disco y la canción mexicana" fueron los ingredientes que alguna vez reconoció como fuentes de   Ocho, que ha tenido varios sencillos radiales, uno de ellos, "Todos los días" tuvo una muy alta difusión, lo que se tradujo en un constante ritmo de presentaciones. En 2108 fue parte del grupo Pillanes, comn ex miembros de Los Bunkers y de Chancho en Piedra, y el 2019 comenzó a presentar su quinto disco, que adelantó con el sencillo "Amar en silencio". Producido por Cristián Heyne, el disco lo acercó a sonidos más electrónicos, pero su lanzamiento —que sería su debut solista en el Teatro Caupolicán— se vio postergado primero por el estallido social y luego por la pandemia.

Retorno a México
"Hasta Luego" fue  el nombre de un peculiar  concierto ofrecido por Pedropiedra y su banda a inicios de marzo de 2023 en M100. El nombre era indicativo de su decisión de mudarse junto a su familia a México, donde otra vez activará sus redes de contactos para trabajar profesionalmente  en la sede del mayor mercado musical hispano del continente.