Iñigo Díaz
Ha sido alumno de dos guitarristas modernos y fundamentales (ambos integrantes de La Banda del Capitán Corneta), Pedro Rodríguez y Mauricio Rodríguez, con los que se interiorizó en los lenguajes improvisacionales y la expresión solística. Ya en 2003 Farías comenzó como sideman, actuando con músicos generacionales, como el saxofonista alto Sebastián Zúñiga, el clarinetista Alfredo Abarzúa o el baterista Nicolás Ríos.
En 2005 además integró un conjunto revivalista del hot jazz francés haciendo duplas de guitarra con Federico Dannemann y el violinista Helmuth Reichel. Su siguiente paso lo llevó a Nueva York para participar de un seminario de música improvisada dictado por gente como Jim Black y Ravi Coltrane. Esa experiencia lo llevaría desarrollar un enfoque propio en cuanto a sonido y lenguaje contemporáneo, también inspirado en el guitarrista Ben Monder.
En 2008 organizó su primer conjunto personal, un cuarteto moderno para el que puso una carpeta de nuevas creaciones. Con Agustín Moya (saxo tenor), Cristián Orellana (contrabajo) y Carlos Cortés (batería), publicó su debutante disco Rompecabezas (2009). Poco después, Diego Farías iba a poner la mirada en lo más esencial del jazz, reduciendo su conjunto a un trío de clubes con Gonzalo Gómez (contrabajo) y Cristóbal Massis (batería), con el que grabó el disco Flotar (2012).
Su siguiente experiencia lo llevó a combinar su conocimiento en el jazz y una apertura hacia la música popular y la poesía, desarrollando un repertorio nuevo de composiciones con texto cantado (sus originales "Elefante" y "Poema gris", además de musicalizaciones de otros autores). Así, su tercer conjunto se organizó en torno a la cantante Edra Silva, presentada aquí como un instrumento más de su quinteto de jazz con el que Farías editó el disco Quinteto elefante (2015).
El período decisivo del estallido y, sobre todo, la pandemia llevó a Farías a crear trabajos testimoniales, como los discos The living cuarteto (2020), con una grabación desarrollada en un céntrico departamento capitalino, y Guitarra solo (2021), parte de una serie de grabaciones de varios guitarristas sin compañía que dieron cuenta de cierta enajenación dictada por las cuarentenas sanitarias. En 2022, Farías regresó al trabajo de combos y organizó un nuevo trío para el álbum Espiritual, que tuvo como sidemen a Sebastián González (contrabajo) y Gustavo Díaz (batería).
Actualizado el 24 de mayo de 2022