Macarena Lavín

Un taller de la escuela de música los unió el año 2002, primero con cinco integrantes y la influencia principal de la raíz latinoamericana. En 2003 surgieron sus primeras composiciones. Debutaron con una presentación en el capitalino pub La Máquina, lugar de trabajo del bajista, y hacia abril del 2004 se asociaron a los grupos Dion y Viernes Muerto en el colectivo La Piedra, para organizar actuaciones y fiestas. Según Eduardo, «la gente espera que la hagamos bailar. Tocamos y la gente se prende, se tira contra nosotros y quiere cantar. Eso es lo que llamo "el espíritu gato"».

A fines del 2004, luego de la salida del guitarrista Max Garrido, el grupo grabó su primer disco, Por el rock & roll (2005), cuyas copias fueron todas vendidas en las fiestocatas del trío. Su segundo álbum también se grabó en vivo, pero con arreglos más cuidados y voces: Sinvergüenza (2006) se distinguió por letras de crítica social (como "Creyentes del general", sobre la ley de responsabilidad penal juvenil) y por otras destinadas sólo a celebrar el gusto por la música, como "El tarado". Editado por el sello CFA Discos, del grupo Fiskales Ad-Hok, Sinvergüenza definió el carácter de Los Gatos Negros, según la banda: "Hay muchos grupos que se roban las canciones y lo esconden. Este disco es la muestra de que tenemos influencias súper claras. Por eso se llama Sinvergüenza, por lo caradura".

Érase una vez en América (2008) incorporó invitados como Camilo Salinas y Álvaro España (Fiskales Ad-Hok), por lo que la calidad interpretativa se pegó un salto, profundizando en el sonido blues con la inclusión ahora de los teclados. El grupo siguió por algunos años hasta que su vocalista, Eduardo Agrela comenzó su proyecto solista, Roque & sus caminantes. Así, dejando atrás Los Gatos Negros a principios del 2012 lanzó su disco debut en agosto del 2013.

Dejando un álbum en el tintero, el grupo se disolvió, pues su vocalista comenzó un proyecto en solitario, Roque & Los Caminantes, a fines del 2011.