La portada de 12 stars, el primer álbum de Melissa Aldana con el sello Blue Note, es otra pieza realizada por la cantante de jazz Cécile McLorin Salvant, también autora de la obra que ilustra la cubierta del disco Visions (2019). Llena de simbologías, allí se puede ver a una mujer que representa a la saxofonista chilena, multiplicada en varios rostros que son necesarios descubrir, junto con un ave Fénix. Desde luego este es el relato autoral acerca de un proceso de caída y resurgimiento, que Melissa Aldana expone en la concatenación de nuevas piezas para quinteto. La sección rítmica está formada por Sullivan Fortner (piano), el chileno Pablo Menares (contrabajo) y Kush Abadey (batería). El guitarrista noruego Lage Lund, arreglador y productor del disco, es el quinto en cuestión y toma un estatus especial dentro del desarrollo de la música. Existe un diálogo sostenido entre ambas voces, que en la improvisación termina dando forma a esa composición de Melissa Aldana. En lo narrativo, 12 stars habla de las doce estrellas en la corona de La Emperatriz, una de las cartas del Tarot, que la chilena tomó como inspiración. La música se contextualiza además en el impacto que generó la pandemia en 2020: esas doce estrellas también son los meses del año más duro del siglo. Aldana habla de ello a lo largo de todo el repertorio, desde "Falling", la caída libre hacia la incertidumbre y el miedo, e "Intuition" y el instinto de supervivencia, hasta la propia reflexión de "12 stars". En el intertanto aparece "Los ojos de Chile", que observa desde lejos los acontecimientos del estallido social de 2019, y "Emilia", una pieza que nació de un sueño de Melissa Aldana y una hija a la que ella intentaba hacer dormir con la misma melodía que sostiene la composición como canción de cuna. —Iñigo Díaz