Iñigo Díaz

Festivales de la voz y concursos en radios fueron las primeras instancias donde apareció la niña Romina Núñez como talento musical en formación. Desde los siete años había estudiado teoría y guitarra folclórica en la Escuela Experimental Artística, lo que la llevaría poco después a integrar el elenco infantil Cuncumenitos. Además, en su adolescencia estudió canto con Juan Carlos Carvajal, guitarra clásica con Romilio Orellana y flauta traversa con Wilson Padilla, en la Universidad de Chile. En 2002, ya con plena autonomía, se unió al conjunto de proyección Cuncumén, dirigido por Mariela Ferreira, donde permaneció por cuatro años.

Entonces, en 2007, llegaría al conjunto pionero de cueca Las Torcazas, formado únicamente por mujeres. Como guitarrista grabó el disco Cueca en la ciudad (2007). Desde ese mismo elenco femenino, las torcacitas Romina Núñez y Gabriela Contreras trabajarían juntas desde 2009 en el dúo Las Comaires, con coloridos vestidos y alternando guitarra y arpa, con repertorios de cuecas centrinas. Una experiencia fuera del ámbito folclórico la llevó a tocar el bajo eléctrico en la banda de rock fusión de Pancho Miranda, con quien grabó dos discos. Su trabajo como solista se circunscribe, sin embargo, a ese legado folclórico que recibió desde sus primeros tiempos, aunque en una cantautoría moderna que se mueve en el campo de la fusión. Su primer disco es Desde el vientre (2014).