Jorge Leiva

Patricio Zúñiga Jorquera (n. 1944) comenzó a cantar en los actos escolares de su escuela República de Haití, del llamado barrio Huemul, en lo que era el entonces el suroeste de Santiago. Su situación económica, como se narra en el sitio Tiesos pero cumbiancheros, lo obligó a dejar los estudios para trabajar en la mueblería de su padre, labor que alternó con su participación en concursos radiales para cantantes aficionados. Por esos circuitos lo conoció Silvio Ceballos, el director de la Orquesta Los Peniques, que a los 19 años lo convirtió en músico profesional al contratarlo como cantante de la orquesta y, al mismo tiempo, bautizarlo como Tommy Rey.

Tras dos años en la orquesta, que entonces vivía ls últimos momentos en su historia, Tommy Rey se integró a La Sonora Palacios, y puso la voz para los más clásicos discos de esa agrupación, nombre fundacional de la cumbia en Chile. En marzo de 1982, sin embargo, tras 17 años de actividad, un quiebre de los músicos con los hermanos Marty y Jorge Palacios, provocaron que él y otros cuatro integrantes dejaran el grupo: Benito Villarroel (trompeta), Miguel Castro (guitarra), Patricio Cereceda (bajo), y Fernando Adám (piano).

Tommy Rey explicó la separación en una entrevista de 2012 para el sitio Tiesos pero cumbiancheros:

Llegó el año ’82 y había un problema bastante grave, no teníamos mucho trabajo, había problemas económicos en el grupo, no grabábamos ya, estábamos bien estancados y eso mismo hizo que conversáramos entre nosotros, los que no éramos hermanos Palacios, y dijéramos ‘no podemos aguantar esta situación’. Entonces decidimos separarnos, formar otro grupo.

A los músicos disidentes se sumó Leo Soto, percusionista con estudios de música, y con vasta experiencia en orquestas, locales nocturnos, hoteles, programas de televisión e incluso el Orfeón de Carabineros. Él asumió la dirección y el liderazgo del conjunto, al que se sumaron dos trompetistas (Luis Césped y el experimentado Leonardo Núñez). Así comenzaron a buscar lugares para presentarse, en un proceso que en sus inicios no fue fácil. Por un acuerdo de todos los músicos, acordaron tomar el nombre del cantante y llamarse La Sonora de Tommy Rey.

Su aparición en el programa de TVN "El festival de la una", que se transmitía diariamente y donde fueron número habitual en pantalla, le permitió conseguir nuevas presentaciones y grabar su primer cassette con el sello Philips, el mismo que editaba la música de La Sonora Palacios. Registraron el tema del colombiano Johny Arce “Daniela”, de 1979, con arreglos de Leonardo Núñez. Se convirtió en el primer gran clásico de su naciente repertorio.

En 1984 protagonizaron un popular comercial del vino Concha y Toro (“el familiar, de gusto regalón”), y fueron invitados en muchas ocasiones al programa de mayor impacto televisivo de la época, "Sábados gigantes". Su popularidad se multiplicó. Al mismo tiempo la orquesta tropical mantuvo una constante edición de cassettes. Tras el cierre de Philips en Chile en 1983 continuó con el sello local Star Sound. En 1988, se cambiaron al sello CBS (Sony desde 1992), con quienes estuvieron por casi una década y donde editaron sus primeras producciones en formato CD. Además de regrabar sus propios éxitos, el repertorio de la propia Sonora Palacios y otros géneros musicales como el bolero, lanzaron nuevas canciones que llegaron a tener categoría de clásicos de su repertorio: “Pipiripau” y “La parabólica”.

A fines los años '90, su música se extendió a las nuevas generaciones y públicos. En 1999 actuaron en la Fiesta de Año Nuevo en el Espacio Riesco, un reducto principalmente para sectores sociales acomodados, demostrando que la cumbia ya no era solo de consumo popular, como lo había sido durante décadas. Luego vino su popularidad en fiestas universitarias y los saludos musicales de músicos de rock, como Chancho en Piedra o Joe Vasconcellos, quienes tomaron algunas de sus canciones y se acompañaron en escenarios. El año 2004 debutaron en el Festival de Viña del Mar y en adelante la música y el nombre de La Sonora de Tommy Rey se expandió en distintas direcciones.

La orquesta ha grabado duetos de sus grandes éxitos, editado nuevos álbumes de canciones originales, se ha reencontrado en la escena y en grabaciones con La Sonora Palacios y ha sido invitada a muchos discos y conciertos de distintos músicos chilenos. La Sonora de Tommy Rey ha actuado en centenares de escenarios, desde matrimonios privados a grandes estadios o festivales políticos y como la Fiesta de los Abrazos del Partido Comunista. En 2013 presentaron "Una mujer", una canción de homenaje a la dirigenta comunista Gladys Marín.

Por La Sonora de Tommy Rey han circulado muchos músicos, y a cuatro décadas de esa formación original de 1982, solo quedaban dos músicos, Leo Soto y Tommy Rey. Han sido los depositarios de una tradición orquestal y tropical, el principal referente activo de la cumbia chilena y que en ese recorrido ha mantenido un ritmo de más de cien shows anuales, con un repertorio que todos los chilenos han bailado alguna vez.